Todos los medios se hicieron eco de la noticia. El 4/6, como aquí lo llaman, despertó la curiosidad de los turistas y occidentales que viven en Beijing mientras que sus propios ciudadanos paseaban por la plaza como si tal cosa. Una de cada dos personas que se encontraban en la inmediaciones era policía o agente secreto y llevaban un paraguas que hacía a veces de protector solar y otras de telón. Ocultar la tensión del ambiente era una utopía y los que nos quisimos adentrar en la plaza experimentamos un riguroso control de pasaportes, bolsos y demás objetos sospechosos de difusión. Entramos, sí, pero pocos occidentales pudieron hacerlo y los que allí nos encontrábamos tuvimos que sentir el peso de mil ojos vigilando a todo sospechoso. Un aniversario que se celebró en secreto con una seguridad de la que hacen gala cada día.
Desde que decidimos tomar este tren hacia China, muchos fueron los que nos adelantaron que se pondrían en contacto con programas donde los españoles que viven fuera hacen de guías ante una cámara. No hizo falta esa llamada. Esta semana Callejeros viajeros de la cadena Cuatro aterrizó en Beijing y nos propuso que pasásemos una tarde con ellos. Miedo vs curiosidad. Aquello a lo que nos habíamos negado, nos llegó por sorpresa y no pudimos rechazarlo. En pocas semanas saldrá en televisión y esperamos que lo que veáis despierte ese gusanito que os anime a visitar la capital del norte.
A las 13:08 horas del 6 de junio de la Estación del Oeste de Beijing salió nuestro tren con destino Kowloon. Nosotros pudimos verle partir desde el andén. El día amaneció gris, lluvioso y tornó en negro. Un mal cálculo de las distancias y del tiempo y la confianza del osado nos hicieron ver cómo nos cerraban las puertas de facturación y perder el tren.
Lo peor vino inmediatamente después. La persona (china) que creíamos que nos estaba ayudando resultó ser un “busca vidas”. La frustración y el nerviosismo nos hicieron ser confiados y bajar la guardia. El tipo en cuestión nos hizo un cambio de billete sin que nos diésemos cuenta y sólo pudimos recuperar el importe de uno de los billetes. Nos timaron, sí, pero vendimos cara nuestra piel. Intentamos denunciar el suceso pero, cuando nos dimos cuenta de que aquello no iba ninguna parte, pensamos ya sólo en el nuevo intento de coger el próximo tren a Kowloon este lunes 8 de junio. Mañana seremos los primeros en pisar ese andén.
Muy curiosa la foto de la Pza de T. con tanto chino "armado" de paraguas...
ResponderEliminarCon que perdísteis el tren y os timaron...¡¡cuántas penalidades!! La vida es dura chicos, pero seguro que estais aprendiendo mucho con estas experiencias.
Contarnos qué tal en el "Puerto Perfumado"
Esclaramunda